Aunque no se le suele prestar atención, la planificación es importante, no solo ayuda a que compremos sólo lo necesario sino que también es muy importante para poder seguir una buena alimentación.
¿Por qué es bueno planificar las comidas?
- Sabemos qué es lo que necesitamos y no gastamos de más.
- No desperdiciamos comida pues compramos lo justo.
- Usamos lo que tenemos en el refrigerador.
- Ayuda a saber que estamos incluyendo todos los grupos de alimentos en nuestra lista y a conocer las proporciones en las que debemos hacerlo.
Intenta siempre buscar la mejor versión de los alimentos que consumas habitualmente. Por ejemplo, elige siempre carbohidratos integrales y grasas saludables (frutos secos, aguacate, semillas…).
¿Cómo empiezo a organizarme?
Hay que tener en cuenta nuestros horarios y rutinas. ¿Qué días hay más tiempo libre para cocinar, para desinfectar los alimentos y para hacer las compras?
También hay que organizar los horarios en los que comeremos, pues nos ayuda a mantener una rutina saludable, con horarios desbalanceados el cuerpo puede engordar, corremos riesgo de tener gastritis, acidez estomacal, colitis, entre otros padecimientos.
¿Cuáles son los horarios recomendados para comer?
Los tiempos óptimos para cada comida son las 7:00 de la mañana para el desayuno, las 12:30 de la tarde para la comida y las 6:00 p.m. para la cena. Sin embargo hay que ajustar estos horarios a nuestras necesidades.
La tendencia es que no pasen más de 5 horas entre desayuno y comida, y comida y cena. (Estos horarios fueron resultado de un estudio realizado por investigadores de las universidades de Murcia, Harvard y Tufts). Pero, no hay que dejar el estomago vacío entre esas horas, se puede comer un snack saludable: una fruta, verduras con limón, sal y chile, un puñado de semillas o una barrita de proteína funcionan como snacks.
Sobre todo hay que recordar no saltarse comidas ni cenar demasiado tarde.
Otros consejos para planificar las comidas:
- Empieza seleccionando la temática de cada día de la semana. Por ejemplo: el lunes vegetariano, el martes carbohidratos, el miércoles combinación de varios grupos… Selecciona también qué días añadirás proteínas como carne, pescado, huevos o vegetal.
- Una vez hayas acotado la temática, podrás empezar a decidir qué recetas prepararás. Elige las que más se adapten a tus necesidades: más rápidas y fáciles en días de menos tiempo y más elaboradas en días que tengas más tiempo.
- Revisa tu refrigerador y la despensa para saber qué tienes guardado y como lo puedes usar y anota todos los ingredientes que faltan para preparar la lista de la compra.
- Ve a comprar sin hambre o compra online.
- Organiza qué días vas a cocinar y prepara algunos alimentos para adelantar tiempo. ¿Qué es lo que puedes avanzar?
- Corta verduras (zanahorias, pepino, pimiento, calabazas) y guardarlas en un recipiente en el refrigerador.
- Puedes cocinar también arroz o quinoa y guardarlo en el refrigerador hasta 3 días.
- Cocina salsa de jitomate natural para añadir al arroz, a las pastas integrales o a la quinoa.
Si te cuesta trabajo también puedes buscar planificadores semanales de comida en internet, en ocasiones, diversos sitios web ofrecen los suyos de manera gratuita y en PDF para descargar e imprimir.
Referencias: