Cada segundo, cada día, trillones de partículas nos atraviesan a la velocidad de la luz y ni siquiera nos damos cuenta, cuando viajan por el espacio atraviesan planetas enteros. Los neutrinos son algunas de las partículas más abundantes en el universo.
Las también llamadas “partículas fantasma”, fueron descubiertas hacia el año de 1956 por los científicos Clyde Cowan y Frederick Reines, se creía que no tenían masa atómica pero recientemente se descubrió que sí tienen pero que es muy pequeña; en el año 2016 se pudo determinar que mide menos de la milmillonésima parte de la masa de un átomo de hidrógeno y debido a que la interacción con las demás partículas es mínima, suelen pasar a través de la materia sin apenas perturbarla.
Es tan pequeña que para que le sea posible interactuar con la materia según los cálculos de física cuántica, sería necesario un gran muro de plomo de una longitud de un año luz (9.46 billones de kilómetros) para poder detener al menos a la mitad de los neutrinos que pasarán por él.
En el año de 1962 los científicos Leon Max Lederman, Melvin Schwartz y Jack Steinberger detectaron por primera vez el “neutrino muónico”, y en el año 2000 fue anunciado por parte de la colaboración Donut en Fermilab el descubrimiento del “neutrino tauónico” es así como se determinó la existencia de 3 neutrinos (neutrino electrónico, muónico y tauónico), este es un gran descubrimiento para la física ya que la masa del neutrino implica consecuencias en el modelo estándar de la física de partículas, debido a la posible transformación entre los tres derivando en un fenómeno conocido como “oscilación de neutrinos”
“Conocer la masa del neutrino permitirá a Los científicos responder preguntas fundamentales en astrofísica, física de partículas y cosmología” afirma Hamish Robertson científico de KATRIN y profesor de física en la Universidad de Washington.
Fuentes
Neutrino properties nakamura, k. et al doi: 10. 1088/0954-3899/37/7ª/075021, Particle Data